La veterana Lindsay Davenport no ha significado un obstáculo importante para María en el encuentro de segunda ronda de Melbourne. La siberiana se ha impuesto por 6-1, 6-3, en un partido donde se han visto las caras dos generaciones(Lindsay tien casi 32 años) y dos velocidades en el juego. Si bien en el saque ambas tienen un buen nivel, a partir de que la bola está en juego María imprime una rapidez de movimientos que no puede seguir Davenport. Casi siempre dentro de la pista, mandando, María ha barrido a la norteamericana en el primer set y, tras un inicio del segundo más igualado, con la rotura de María en el séptimo juego, ha finiquitado el encuentro.
En tercera ronda, María se las verá con su compatriota Elena Vesnina, que no parece vaya a ser una rival difícil.
16.12 horas- de Barcelona.
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